Existen cinco configuraciones principales en el diseño de Sistemas de Alimentación Ininterrumpible (UPS o No Break), que distribuyen en la alimentación las cargas críticas del centro de datos. La elección de la configuración adecuada para cada tipo de aplicación viene determinada por las necesidades de disponibilidad, la tolerancia a los riesgos, los tipos de carga, el presupuesto y la infraestructura existente.